Buenas noches, queridos compañeros:
Os damos la bienvenida a esta Eucaristía que da comienzo a la celebración del sexagésimo aniversario del Colegio al que todos pertenecimos y al que, si estamos hoy aquí es porque de cierta forma, siempre perteneceremos. Los alumnos del Colegio San José tenemos la gran fortuna de recordar siempre nuestros años vividos en él con añoranza, cariño, y alegría.
Nuestra infancia y adolescencia está marcada por estas paredes, por los religiosos, profesores, personal y compañeros con los que compartimos esos momentos, vivencias que marcaron nuestra infancia y adolescencia: convivencias, las fiestas de la Inmaculada, las Olimpiadas, las verbenas, los teatros, los campamentos, el patio de las flores…
Incontables momentos de felicidad, a través de los que nos educaron en el amor y el compromiso con el otro. Todo forma parte de nuestros recuerdos, y todo ello forjó lo que somos.
Hoy nos ponemos ante el Señor para agradecerle los 60 años en los que los hermanos de los Sagrados Corazones llevan educando en este centro, y nos ponemos en manos de la Virgen Inmaculada para que su mano siga guiando los pasos de este colegio, así como su corazón nos sostenga todos.